jueves, junio 21, 2007

¿Sabrá Ugalde quién ganó el 2 de julio?

Milenio Diario, 21 junio 2007
Javier Sepúlveda.
.
Está por cumplirse un año, dentro de 12 días, de las elecciones presidenciales más controvertidas del México contemporáneo, las cuales hasta los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación admitieron que Vicente Fox había metido las manos desde la Presidencia de la República.
.
Con un proceso inequitativo, con encuestas secretas ordenadas desde Los Pinos para sondear el efecto de la guerra sucia, y con medios electrónicos comprometidos para hacerle el juego al partido en el poder, con la promesa de eternizar su monopolio, hoy tenemos un Presidente panista débil.
.
A Felipe Calderón, ya se vio, lo siguen abucheando en eventos públicos, como le acaba de ocurrir en Bellas Artes, en un evento cultural al que acudió como mandatario de república bananera: luciendo la investidura presidencial y con un ejército de guaruras que convirtieron en retén militar un recinto artístico.
.
Los elementos del Estado Mayor Presidencial revisaron hasta las bolsas de las damas, pero no los cerebros ni las gargantas que abuchearon al mandatario en pleno evento.
.
Hay quienes sacarán a la palestra la sobada frase de que “si le va bien al Presidente, le va bien a México, y por eso debemos apoyarlo”.
.
La verdad es que ex presidentes van y vienen, primero del PRI y ahora del PAN, y a pesar de ellos México sigue siendo una de las primeras 15 economías del planeta; pero, eso sí, gracias a ellos, en los niveles de distribución de la riqueza estamos en los últimos lugares mundiales.
.
Y, que sepamos, a los últimos presidentes no les ha ido nada mal en lo personal, o al menos ninguno anda pidiendo limosna, sino, por el contrario, son consejeros de grandes trasnacionales, y casualmente algunas de estas empresas son las mismas que ellos vendieron durante su sexenio.
.
Todos los ex mandatarios andan en la calle muy campantes, mientras la brecha de la desigualdad sigue abriéndose en México, dejando en claro dos cosas: que en sus campañas sólo dijeron mentiras, y que cuando llegaron al poder sólo se dedicaron a pagar las facturas a quienes financiaron su ascenso al cargo y a beneficiar a los amigos, los compadres y los parientes, y como muestra ahí está la feliz familia Fox-Sahagún.
.
¿Qué debemos esperar entonces de un gobierno que finca sus prioridades en publicitar a todas horas sus victorias pírricas contra la delincuencia organizada y en visitar El Vaticano para saludar al Papa seguido de corifeos que cronican que “este Presidente ni se arrodilló ni besó la sortija del jerarca católico”?
.
La verdad es que, al margen de la reforma fiscal que promete Agustín Carstens, la equidad en este país comenzará por la democracia, pero con un verdadero árbitro que regule sus procesos electorales, porque si Luis Carlos Ugalde tuviera vergüenza, ya hubiera renunciado.
.
El presidente del consejo del IFE acaba de pedirle ayuda a la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión para sacar las cifras reales de los spots de la campaña presidencial del año pasado, porque ya nadie sabe cuál de los candidatos pagó más tiempo por estar al aire.
.
Sólo falta que cuando deje el cargo, Ugalde confiese en algún recinto académico del extranjero que nunca tuvo la certeza de quién ganó las elecciones de 2006.
.
Pero la pobreza y la desigualdad seguirán aquí.

No hay comentarios.: