sábado, junio 04, 2011

Sicilia recibe premio Global Exchange de Derechos Humanos


El poeta J. SICILIA recibió en San Francisco el premio Global Exchange de derechos humanos.
El pueblo de EU, cómplice de crímenes de lesa humanidad si no frena a su gobierno: Sicilia.
Washington, responsable del dolor de los mexicanos; apoya una guerra que no se atreve a librar aquí.
Periódico La Jornada, Viernes 3 de junio de 2011, p. 15

Al recibir en San Francisco, California, el premio Global Exchange de derechos humanos, el poeta mexicano Javier Sicilia señaló que para lograr cambios democráticos que detengan la violencia desatada por el combate gubernamental al comercio ilegal de drogas, es necesaria la participación de la sociedad estadunidense ante las políticas de su gobierno.
Su responsabilidad en los crímenes y la injusticia que vivimos en México es absoluta. Su consumo de drogas, su apoyo irrestricto a una guerra que no se atreve a tener dentro de su territorio, su industria armamentista que nos está asesinando, deberían hacer que los ciudadanos de Estados Unidos se movilizaran para exigir a su gobierno un cambio en esta estrategia que día con día nos está costando mucho en vidas, dolor y destrucción. Si no lo hacen, serán cómplices de crímenes de lesa humanidad.
Desde hace cuatro años –sostuvo–, jóvenes, niños, ancianos, hombres y mujeres en México viven desprotegidos por el Estado, que extravió su vocación primera: cuidar de la seguridad de los ciudadanos. Señaló que sólo 2 por ciento de los crímenes son resueltos y que los 40 mil muertos y 10 mil desaparecidos, convertidos en cifras y expedientes abandonados, son el saldo “desde que el presidente Felipe Calderón y la política antinarco de Estados Unidos decidieron declarar la guerra al narcotráfico en México, con base en una estúpida política bilateral.
Para Sicilia, las causas de este horror son resultado de una guerra absurda, del largo pudrimiento de las instituciones de México y de la insensibilidad política de Estados Unidos que, para mal evitar su consumo de droga, instalaron una guerra que no ha disminuido el tráfico ni el consumo, y nos está costando miles de muertos y desaparecidos. Mientras, Estados Unidos tiene legalizada una industria peor que la droga: la armamentista, que arma tanto a las fuerzas del Estado mexicano como a las del crimen organizado. Y, coludidos, bancos e instituciones estadunidenses y mexicanos lavan dinero mientras los ciudadanos de México vivimos en la miseria y el terror.
Esa política está, en todos sentidos, equivocada, argumentó el poeta mexicano: Por un lado, la droga no es un asunto de criminalidad, sino de salud pública. Por otro, una ley de seguridad nacional basada en la violencia y comandada desde instituciones cooptadas, corrompidas y ajenas al servicio de la nación, sólo puede perpetuar la criminalidad y el horror. México no sólo está destruido en sus instituciones, sino en su tejido social, y una buena ley de seguridad nacional debe tomar en cuenta esos factores.
En cuanto al esfuerzo del movimiento por una Paz con Justicia y Dignidad, convocado por él, pidió al pueblo de Estados Unidos compartir y apoyar; es una prueba de amor y confianza en lo mejor de nosotros mismos; la prueba de que a pesar del horror y el miedo que quieren instalarnos, los ciudadanos aún nos sentimos firmes para continuar buscando la paz, la justicia, la libertad y la democracia que nos están arrancando.
Afirmó que recibía la presea en nombre de todas las víctimas de la actual violencia, entre ellas su hijo Juan Francisco, como un gesto de amor y solidaridad de un pueblo hermano que puede ayudarnos mucho en este largo y doloroso camino que los mexicanos hemos emprendido por la paz, el consuelo y la justicia. México y Estados Unidos deben preferir el esfuerzo de la razón a la política del poder y la guerra. Hay que elegir hoy entre hacer cosas humildes y eficaces o aceptar el crimen y la imbecilidad como regla de vida. Me parece que no es difícil la elección.
En el acto también se distinguió a Pablo Solón, embajador de Bolivia ante la Organización de Naciones Unidas, por su lucha y la de su gobierno en defensa de la Tierra, y a la química estadunidense Wilma Subra, por su activismo en favor de las víctimas del derrame petrolero del Golfo de México en las costas de Luisiana. En ocasiones anteriores han recibido la distinción Eduardo Galeano, Alice Walker y Harry Belafonte.

Organizaciones civiles de NL invitan a sumarse y asisitir este martes 7 de junio



COMUNICADO DE PRENSA

4 de junio de 2011

La sociedad civil regiomontana se organiza para recibir y ser parte de la Caravana Ciudadana por la Paz con Justicia y Dignidad. Monterrey es una de las nueve ciudades-parada que recorrerán los cientos de mexicanos y mexicanas que hoy salieron de Cuernavaca, para arribar el 10 de junio a Ciudad Juárez, ciudad dolida, dañada por la pérdida de sus hijos más desprotegidos, más vulnerables: sus mujeres y sus jóvenes. Allí se firmará el Pacto Nacional por un México en paz con justicia y dignidad, como simbólico inicio de una larga lucha social, como única salida posible contra la impunidad y la corrupción, contra la injusticia y la pobreza, contra la violencia de las bandas delincuentes y de las fuerzas armadas. Será un compromiso suscrito por ciudadanos resueltos a decir ¡Basta! a una guerra que no pedimos y que hoy nos cuesta miles de muertos y de desaparecidos; de hombres y mujeres hartos de una violencia desatada e incontrolada por la miopía estratégica, la insensibilidad social y la codicia política de una clase gobernante y política que ve nuestro País, “saliendo de la pobreza”, a través de promedios estadísticos y cifras macroeconómicas.

En Monterrey recibiremos a la Caravana este martes 7 de junio a las 5pm. Las organizaciones, colectivos y personas que nos sumamos lo hacemos porque no queremos que nuestra indiferencia se convierta en complicidad. Sabemos que lo que urge es romper con el individualismo, el miedo, y necesitamos unirnos, generar diálogos y organizarnos, antes de que nuestros derechos humanos y garantías individuales sean enlatados por el “bien nacional”.

Nuevo León ha se sumarse a esta lucha que hoy inicia una nueva fase para reeducarnos como sociedad participativa, a fin de desterrar la inequidad económica, laboral y social, por alcanzar la justicia sin distingo de clase, porque esas son las causas profundas de la descomposición social que hoy se traducen en violencia y pobreza expansivas: nuestro estado es hoy según el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) la entidad con mayor pobreza laboral del país.

Son ya tantas las muertes, son tantas las familias nuevoleonesas que hoy sufren la desaparición de alguno de sus miembros. Pero ese dolor e indignación hoy proponen volverse reclamo organizado, hermanándose con la esperanza activa de millones de mexicanos para difundir y EXIGIR la satisfacción de los seis puntos enarbolados por este movimiento nacional,

1 Esclarecer asesinatos y desapariciones y nombrar a las víctimas

2 Poner fin a la estrategia de guerra y asumir un enfoque de seguridad ciudadana

3 Combatir la corrupción y la impunidad

4 Combatir la raíz económica y las ganancias del crimen

5 Atención de emergencia a la juventud y acciones efectivas de recuperación del tejido social

6 Exigimos democracia participativa

Acudamos a saludar y solidarizarnos con la Caravana, este martes 7 de junio a las 5pm en la Explanada de los Héroes, de allí marcharemos hacia la Plaza de Colegio Civil, para realizar un acto público de información y convivencia entre los nuevoleoneses y los caravaneros encabezados por Javier Sicilia.

ORGANIZACIONES CIVILES DE NUEVO LEÓN.

Adherentes individuales de la Otra Campaña en Nuevo León

Alianza Cívica, A. C. – Nuevo León

Alianza de Usuarios de Servicios Públicos

Alternativas Pacíficas, A.C.

Asociación Nacional de Abogados Democrática

Asociación de vecinos unidos de Nuevo Mezquital, A.C.

Asociación Regiomontana de Trabajadores Especiales A.C.

Casa Migrante San Nicolás Tolentino

Ciudad_es

Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos, A.C.

Colectiva Difusora Braver

Colectivo Ágape

Colectivo Ciudadano en Defensa de la Pastora

Colectivo Estudios Jotos

Colectivo Demos Praxis

Colectivo juglaresas- Teatro Popular

Colectivo Biciérnagas

Colectivo Contingente Monterrey

Colectivo La Bola

Colectivo Librado Rivera

Colectivo Plural de Mujeres

Colectivo Rompiendo la Noche

Colectivo Rosas Rojas

Colectivo Comida No Balas

Comisión de Resistencia Civil Pacífica, en N.L.

Coordinadora Nacional para la defensa de los ex-braceros – Nuevo León

Denuncia 2.0

Enlace Potosino, A.C.

Evolución Mexicana, A. C.

Familiares Unidos por nuestrso desaparecidos en el Edo. de Coahuila

Género, ética y salud sexual, A.C.

Juventud Comunista de México

Iluminemos Nuevo León

Pueblo Bicicletero

Procuración de Justicia Étnica

Propuesta Cívica, A.C.

Red de Defensa Ciudadana, A.C.

Red de Trueque Irpasi

Rehilete Colectivo

Resistencia Civil Pacífica en Nuevo León

Revista Deliberación

Sociedad Cultural Regiomontana

Zihuame Mochilla, A.c.


La Caravana del Consuelo: del dolor a la esperanza



Del dolor a la esperanza: la caravana del consuelo rumbo
al Pacto Nacional por la Paz en Ciudad Juárez
Cuatro de junio de dos mil once, el alba asoma en el horizonte al ritmo del palpitar de corazones afligidos por la muerte y la ausencia de quienes no debemos olvidar, pero también duelen la necedad y el cinismo de quienes se atreven a sostener o justificar el estado de guerra en nuestra patria, al costo de miles, decenas de miles, de vida inocentes. Es 4 de junio por la mañana y la caravana del consuelo inicia su recorrido hacia la reconstrucción pacífica de la justicia y dignidad en México.

De muchos puntos se han congregado para sumarse o acompañar de corazón (consolar) a las víctimas de la guerra de Estado y a quienes recorrerán con ellas miles de kilómetros para reavivar la esperanza en un camino pacífico de recuperación de nuestra soberanía, arrebatada tanto por el crimen organizado como por la corrupción del Estado y la voracidad de las industrias. Trece autobuses y un número igual o mayor de autos particulares repletos de expectativas diversas pero convergentes en un anhelo común: no a la guerra, sí a la paz con justicia y dignidad.

Primera parada: Ciudad de México, en el Ángel de la Independencia. A los muchos que eran, se suman más y más. Con mochilas, pancartas, consignas llegan estudiantes, profesionistas, luchadores sociales, gentes de fe, gremios, intelectuales, poetas… comparten miedos y gozos. Un sencillo y profundo acto conmemorativo recuerda a las hijas e hijos, padres y madres, hermanas, hermanos de todos los mexicanos, cuyos nombres ha querido borrar el mar de sangre que mancha nuestro territorio y nuestras ganas de un país mejor. Javier Sicilia vuelve a convocar a la solidaridad y a la dignidad, y mantiene su demanda al Estado por el fin de la vía militar.

Hacia el medio día, todo está listo para continuar el camino, y así sucede. Muchos van en los camiones, pero también muchos despiden con una promesa: nos vemos en Juárez, estaremos atentos, estamos con ustedes… o sólo dicen adiós o hasta luego con palabras, gestos, deseos. Otros desconcertados miran pasar y pasar camiones donde reza: por un México en paz con justicia y dignidad.
Desde la fe hay sentimientos encontrados, un mal sabor de boca por el silencio o colusión de las estructuras religiosas con la estrategia de guerra del Estado; surgen muchas preguntas para las religiones, preguntas sin respuesta o con desafortunadas posturas anti-éticas. Bien recuerda Pablo Richard que los pobres ya no luchan hoy solamente contra las clases opresoras y sus mecanismos de explotación, sino también contra los fetiches e ídolos de opresión del sistema dominante, donde se da la justificación religiosa de la guerra, donde los dioses exigen el sacrificio humano de gente inocente para alcanzar purificación y salvación. Es una fe perversa la que aún sostiene esto. ¿Qué le pasa a las religiones y sus prominentes líderes? ¿Cuándo el inocente, a quien deben proteger a toda costa, se convirtió en el costo de la liberación? ¿Qué le pasa al Estado que sacraliza la guerra y hace sacerdotes a sus ejércitos?

Existe en cambio otra fe, que hoy puebla los corazones de muchas y muchos, ante el hartazgo de la violencia y la impunidad. Una fe (religiosa y no) en lo humano, en la paz, en otro camino posible libre de violencia. Esa fe sostiene el camino y el caminar de la caravana del consuelo, e invita a despertar del letargo o del miedo, que nos arrincona, nos esconde del otro y al otro. No podemos justificar la violencia tanto como no podemos permanecer impasibles ante ella. Son cinco días de camino hacia el Pacto Nacional, que no es punto de llegada sino de partida. En este tiempo, hemos de sentirnos convocadas y convocados, interpelados, a tomar postura y sumarnos a esta lucha pacífica. Es una camino de reconciliación nacional, reconciliación de unos con otros, para salir de la apatía (que significa la negación del sufrimiento propio o ajeno) y sumar esfuerzos.

Hoy la fe y la esperanza se tornan fundamentales, sea que profesemos una creencia u otra, o ninguna; nada nos exenta de ser humanos, hermanas y hermanos. El caminar empieza, y no habrá un final deseado sin el apoyo de todas y todos.

Caravana del Consuelo, 4 de junio de 2011
Centro de Estudios Ecuménicos



viernes, junio 03, 2011

Sondeo de México Unido contra la delincuencia


Enfrentamiento entre sicarios en Sinaloa el 25 de mayo de 2011.


Narco va ganando guerra a Calderón: sondeo de México Unido


Miguel Cabildo

MÉXICO, D.F., 1 de junio (apro).- A pesar de la millonaria campaña de medios, el gobierno del presidente Felipe Calderón sigue sin poder revertir la percepción ciudadana de que el crimen organizado va ganando la guerra a las autoridades federales, según México Unido Contra la Delincuencia (MUCD).

Y así lo dejan ver los datos: En sólo un año, la percepción pasó de 30 a 58% entre el número de consultados.

Conforme a la última Encuesta Nacional sobre la Percepción de Seguridad Ciudadana en México, realizada por Consulta Mitofsky de manera conjunta con México Unido contra la Delincuencia (MUCD), y cuyos resultados se presentaron hoy, 82% de los encuestados refiere que la seguridad pública está peor ahora que hace dos años.

Por ejemplo, uno de cada seis mexicanos conoció a alguien que murió en la lucha contra el crimen organizado, mientras que en el norte del país la cifra es uno de cada cuatro.

Más aún, 54% de los encuestados afirma que es sencillo hacerse de un arma de fuego.

Sin embargo, 70% se pronunció en contra de que se autorice la venta legal de las drogas.

El sondeo también muestra que la inseguridad es el centro de las preocupaciones de los mexicanos: mientras hace un año los problemas económicos ocupaban 26 puntos porcentuales por encima de la inseguridad, actualmente la inseguridad los supera por un punto.

De acuerdo con la presidenta de MUCD, Josefina Ricaño, “estos datos indican que, en opinión de la ciudadanía, la violencia se está recrudeciendo, por lo que la estrategia de seguridad implementada por el gobierno federal no está dando los resultados esperados y que los temas relacionados con prevención del delito, cultura de legalidad y mejora en condiciones y oportunidades de trabajo, salud, educación y cultura, no pueden seguir siendo ignorados o rezagados”.

Es por ello que hizo un llamado para que las peticiones de la sociedad civil sean escuchadas y tomadas en cuenta por las autoridades correspondientes, haciendo énfasis en los grandes rezagos de los compromisos asumidos desde la firma en 2008 del Acuerdo Nacional por la Seguridad, la Justicia y la Legalidad.

Respecto a la cercanía de los mexicanos con la guerra contra el narcotráfico, uno de cada seis mexicanos conoció a alguien que murió producto de esta lucha contra el crimen organizado. Y es clara la diferencia regional, ya que en el norte la cifra es uno de cada cuatro.

Otro dato que destaca el sondeo es que 71% de los entrevistados aprueba aumentar la presencia de soldados en las ciudades del país, pero 67% rechaza la actividad de agentes de Estados Unidos en territorio nacional.

Sobre la legalización de las drogas, una amplia mayoría (70%) se pronunció en contra de esta acción y 74% se opuso a llegar a algún acuerdo como medida de negociación con las bandas del crimen organizado.

Finalmente, otro tema que se destaca en los resultados de esta encuesta se refiere a la cultura de la legalidad.
A los entrevistados se les preguntó su percepción sobre seis eventos y si los consideraban delito o no: 25% consideró que “comprar algo sin factura para no pagar IVA” es legal; 20% señaló que “no usar el cinturón de seguridad” no viola la ley, y 17% dijo que no se debe sancionar el “tirar basura en la calle”.

Además, 16% afirmó que no es delito “comprar piratería” y 10% piensa que el “dar una mordida a un policía” no viola la ley.

La Encuesta Nacional sobre la Percepción de Seguridad Ciudadana en México se aplicó a mil personas mayores de 18 años en todo el país, del 29 de abril al 2 de mayo de 2011, y se llevó cabo en viviendas particulares a través de entrevistas “cara a cara”.



Entrevista a Sicilia

La Caravana y Javier Sicilia

El largo camino hacia la paz



10 de junio: el largo camino mexicano hacia la paz

La caminata sigue, será larga pero tenemos la esperanza que llegará a un punto donde al “levantar la vista veremos una tierra llamada libertad”. Hace pocas semanas la caminata de cuatro días fue para visibilizar a los 40 mil muertos y a los más de 3 mil desaparecidos que existen en nuestro país a raíz de esta guerra atroz hecha en nuestro nombre sin nuestro más mínimo consenso. Ahora caminaremos para encontrarnos todas y todos, como sociedad civil, y comprometernos juntos en una serie de acciones por la paz con justicia y dignidad. Antes fuimos al centro de la historia y el poder de México, ahora

vamos al centro del dolor, la impunidad y la guerra: Ciudad Juárez, con la esperanza que sea también el punto de despegue de una nueva lucha civil y pacífica que detenga !Ya! esta guerra.

Actualmente, en México, la sociedad civil se ha ido convirtiendo cada vez más en un actor central activo en el proceso de violencia social que la atraviesa y que le han instalado desde arriba. Dejó de ser un “daño colateral” o un actor pasivo –a veces hasta cómplice. Como sociedad, ya no queremos poner los muertos, pero tampoco queremos que haya más muertos de ningún bando. ¿En qué contexto se dan estas muertes? Entre muchas cosas, hay un enfrentamiento entre dos modelos sociales de seguridad muy diferentes que estas recientes movilizaciones masivas, a raíz de la convocatoria de Javier Sicilia, han “desnudado públicamente”: una “paz armada” o “paz con justicia y dignidad.”

En Juárez queremos, las organizaciones e individuos de la sociedad civil nacional junto a todas las representaciones internacionales que nos acompañen, firmar un Pacto Ciudadano, ya presentado en su texto base el 8 de mayo en el zócalo capitalino, y enriquecido con la aportación ciudadana en estas semanas previas al 10 de junio. La palabra pacto es ambigua, especialmente en nuestro país con tantas experiencias negativas al respecto, la última de la cuales justamente se rehace a Juárez con “Todos somos Juárez”, trágica profecía para la nación desde el poder. Este término tiene su origen en el latín “pax”, de donde viene “paz”, pero, en las teorías de la paz, corresponde a la llamada “pax romana”, la paz del statu quo -que todo siga igual-, del imperio que busca pacificar sus dominios a partir del derecho y el ejército. Esta es la ”pax britannica”, la ”pax porfirista”, la ”pax neoliberal”. En muchas teorías se define como una idea “negativa” de paz asociada al concepto de que “la paz es la ausencia de guerra”, se trata de la llamada ”paz armada”, que promueve el uso de la fuerza material bélica para evitar precisa y paradójicamente, la guerra.

Pero esta no es la concepción que hay detrás del Pacto Ciudadano que Javier Sicilia y el movimiento por la paz con justicia y dignidad está promoviendo para arrancar en Juárez, sino todo lo contrario. La propuesta central es precisamente detener esta ”paz armada” militarista y construir juntas y juntos otro tipo de paz: “con justicia y dignidad”. La paz debe tener siempre un apellido, sino se puede fácilmente convertir en un absoluto ilusorio y fundamentalista. Muchas tradiciones han apuntado que sin justicia (social y legal) y dignidad (en este caso empezando para las víctimas de la guerra) no puede existir la paz. A la vez, la forma y contenido de esta paz tienen un tiempo y espacio determinados: no es la misma construcción de paz en Juárez, en el DF, en Cuernavaca o en Afganistán.

Esta concepción de paz no es pasiva ni usa la violencia, sino que se basa en la idea gandhiana de “humanizar al adversario” (conociendo mejor el proceso constituyente de su identidad), la judeo-cristiana del shalom (no explotar al otro, reequilibrar las desigualdades económicas, sociales) y el principio humanista de “no hagas al otro lo que no quieres que te hagan a tí”. La famosa frase de Gandhi de ”no hay camino para la paz, la paz es el camino” nos lleva a otra idea central del mismo Mahatma sobre este tipo de paz que la sociedad civil mexicana lucha ahora por instalar en su territorio: “entre los medios y el fin hay una relación tan estrecha como entre un árbol y una semilla, de una semilla podrida no pude nacer un buen árbol…los medios ya son un fin en sí mismos”. O sea, el fin no justifica los medios, todo lo opuesto a la concepción básica de la ”paz armada”: para lograr esa paz puedo bombardear, matar, violar derechos humanos o militarizar el orden social.

En el proceso de construcción civil de la caminata del 5 al 8 de mayo, uno de los obstáculos epistémicos o culturales mayores fue la concepción de ”silencio” que Javier buscó imprimir a la marcha, buscando aclarar que éste se refería a una forma activa y radical de lucha ante tanto ”dolor indecible”. En esta nueva etapa el concepto que ha creado divergencias es el de “dialogar (con las autoridades)”. Se entiende bien este rechazo y desconfianza de muchos sectores sociales por las innumerables malas experiencias recientes e históricas al respecto en México, por eso se ha aclarado mucho, tomando en cuenta sobre todo las posturas de la gente comprometida de Juárez y Chihuahua, que el primer diálogo necesario es entre la ciudadanía y se formalizará el 10 de junio. Será una forma de fortalecernos –en la reflexión colectiva y la fuerza material de masas- para así ejercer mayor presión social por la paz con justicia y dignidad. Hacia las autoridades hay un mandato, una exigencia.

Pero es también evidente que la paz debemos construirla entre todos los sectores sociales, y esa ha sido una de las características históricamente originales de este movimiento hasta ahora –en la mayor parte gracias a Javier Sicilia y su identidad social-, donde al menos en el ¡Alto a la Guerra-Estamos hasta la madre! han coincidido desde la derecha hasta la izquierda, incluso en sus extremos. Un inicio de paz verdadero y real –indica un principio de realidad- no va a venir sólo de un lado, eso traería sólo una mayor polarización y espiral de violencia. Pero también es cierto que no puede haber diálogo, co-operación (como diría Piaget) si no es ”entre iguales…con un respeto mutuo”, algo que no existe actualmente en nuestro país entre la sociedad civil y las autoridades, por ello es claro que antes de dialogar debemos construir una fuerza social capaz de exigir a la autoridad de veras para buscar juntos otro modelo económico, de justicia, social y de paz para nuestro país.

Los ejes 1 y 2 del Pacto, por los que nace precisamente este movimiento, apuntan directamente al tema de la ”paz con justicia y dignidad”: solución inmediata (en un máximo de 3 meses) a 8 casos emblemáticos de brutal asesinato (la mitad de ellos masacres) e impunidad recientes en nuestro país como una forma concreta de avanzar ¡ya! en el terreno de la justicia. También, en el terreno de la dignidad, se propone en todos los rincones del país el rescate de la memoria, historia, rostros de los muertos y desaparecidos en forma pública y abierta.

El 2o. punto exige discutir públicamente, pudiendo incluso llegarse a un gran plebiscito o referéndum nacional, este modelo de la militarización y guerra al delito, que sólo ha aumentado las muertes, el dolor, la impunidad, la corrupción, la violación a cualquier derecho humano, la catástrofe económica y social en innumerables regiones, en suma, como sostiene Sicilia “la destrucción del tejido social de la nación”. La autoridad no puede decidir sola sobre la vida o muerte de sus ciudadanos, ese poder está en la población organizada y no se delega, por ello nos organizaremos en barrios, comunidades, colonias, lugares de trabajo o estudio, espacios culturales, para construir y demostrar públicamente (en un Encuentro Nacional) que ya existen otros modelos de seguridad ciudadana en nuestro país y en otros lados, que no ponen su prioridad en la violencia y las armas. En particular, en México, tendremos que preguntarle cómo lo han logrado a dos experiencias importantes como son las de la policía comunitaria de Guerrero y de las comunidades autónomas de Chiapas, dos territorios nacionales donde se puede afirmar que la droga y el delito no mandan.

A su vez, los otros cuatro ejes del Pacto, complementan a estos dos primeros, y son igual de importantes, pues apuntan a una reforma política nacional urgente, que será la base para evitar que avance legalmente este proceso de guerra e impunidad en todo sentido, y ya no haya más muertos que agregar a tanto dolor nacional. Con particular énfasis en detener la actual propuesta de Ley de Seguridad Nacional.

¿Qué significa entonces la caravana a Juárez del 4 al 10 de junio, por qué hay que tratar de ir los más posibles u organizar algo similar en nuestras comunidades en esa fecha tan simbólica y dolida para México desde el jueves de Corpus del 71, con la masacre de los halcones paramilitares? Es una etapa, una vuelta de tuerca, en esta nueva lucha de resistencia civil y pacífica, noviolenta, que una parte importante de la reserva moral mexicana ha decidido emprender en primera persona, no delegando su poder en otros sino asumiéndolo directamente como en las juntas de buen gobierno del sureste, con el objetivo central que es detener la espiral de la violencia bélica en México, para que no haya más muertos ni desaparecidos, que no haya más impunidad y sí justicia inmediata, a partir de que la paz se construye de abajo hacia arriba desde la sociedad civil activa y organizada.

Los más amplios sectores de la sociedad civil mexicana queremos empezar a hablar menos de la guerra y más de la paz y la justicia, pero en concreto y ¡ya!. En el terreno de la resistencia civil estamos en la frontera entre la co-operación y la no-cooperación, tocará a la reflexión y acción colectiva de todas y todos, incluidas las autoridades, decidir hacia dónde empujar la lucha, pero sin duda ésta va a seguir.

Pietro Ameglio

2 junio 2011

La Jornada-Morelos


CENTROS DE ACOPIO EN N. L. Para la Caravana por la Paz con Justicia y Dignidad

CENTROS DE ACOPIO EN N. L.

CARAVANA POR LA PAZ CON JUSTICIA Y DIGNIDAD


*
CIUDADANOS EN APOYO A LOS DERECHOS HUMANOS, A.C. (CADHAC)

Padre Mier 617 Pte. (frente a la plaza La Purísima, esq. Zarco, al lado de agencia de autos)
Horario de 10 a 4 p.m.

*
CASA DE MOVIMIENTOS

Aramberri No. (Frente a la Alameda, Esq. Con
Horario de : 10:30 a

*
OFICINA DE TATIANA CLOUTHIER

Avenida San Pedro 217 local 19 (Entre Mississipi y Amazonas, al lado de American Express.)
Horario de : 10 a 2 p.m.

*
COMUNIDAD DE HERMANAS DEL SERVICIO SOCIAL

Espinosa 851 Ote. Esquina con Arista
Horario: de 10 a 13 horas y de 3 a 7 de la tarde

*
PARROQUIA DE LA PRECIOSÍSIMA SANGRE

Río Potosí 118 Pte., Cruz con Nuevo León, Col. San Antonio
San Nicolás de los Garza
Horario: 9 a 1 y de 3 a 7 p.m.

*
PARROQUIA DE SAN FRANCISCO XAVIER

Calle Insula 4000. Col Rafael Ramírez 2ndo. Sector
Entre Platón Sánchez ó Noche Buena y Marmol
Horario: lunes a viernes de 9 a 1 y de 3 a 7 p.m.
Sábado 9 a 1 y Domingo de 10 a 1.

*
ENLACE POTOSINO (La casa del Árbol)

Ruperto Mtz. #837 Ote. entre Dr. Coss y Arista
Horario: lunes a viernes de 3pm a 7pm



DONACIÓN DE VÍVERES Y MEDICINAS

Nota: La demanda de botellas de agua para la caravana ya está cubierta, se agradece la colaboración en los siguientes renglones:

Comida:

Paquetes sopa Knorr, paquetes arroz instantáneo, latas de atún, lastas de sardinas, latas de verduras, bolsas de 1 kg. de mayonesa, paquetes tortillas de harina, kilos de leche en polvo, cajas de galletas, cajas de barras de granola, kilos de sal, sobres de saborizante para agua, cajas de huevo, sobres de machaca, cajas de chocolate en barra.

Medicamentos:

Antimicóticos, antipiréticos, antigripales, antibióticos, analgésicos, antidiarreicos, antiinflamatorios


Gracias, los esperamos con su colaboración en especie y su participación en la marcha evento este 7 de junio 2010:


desde Zaragoza, por Padre Mier hasta Juárez y luego a la Plaza de Colegio Civil, donde ya estarán compañeros en espera y con un programa de actividades culturales, a donde se integrará la Caravana y participará Javier Sicilia.

Programa y recorrido completo lo subiremos tan pronto nos sea posible. Estemos pendientes.