El proyecto contra el que se protesta incluye una vialidad que iniciaría a la altura de Los Cristales, en Monterrey y atravesando nuestra majestuosa sierra llegaría a Cadereyta a un paraje denominado Cañón de Santa Ana, donde existen las condiciones naturales de recargas freáticas, especies endémicas y bosques de encinos, entre otras especies de vegetación y fauna natural, que se verían dramáticamente afectados a partir de la intervención humana, dado que la vialidad, de manera ineluctable promovería la urbanización y las consecuencias inherentes a ella.
La construcción de este proyecto, en especial el túnel, no tiene más justificación que la ganancia de empresarios urbanistas. Ya existen vialidades que conectan la Carretera Nacional con Cadereyta en áreas donde ampliar los caminos ya existentes no traería la grave impactación ambiental que implica la construcción de un túnel a través de nuestra Sierra.
La vialidad que se impulsa por el actual gobierno del estado, abrirá a la urbanización grandes espacios en la falda de la sierra o en la sierra misma, áreas que irán siendo cubiertas por asfalto y contribuirán al déficit de áreas verdes así como al calentamiento (más!) de la ciudad y del planeta.
Nuestros esfuerzos deberían ir en dirección de conservación y rescate de áreas naturales, especialmente aquellas áreas verdes que son el hábitat de especies centenarias que serán lastimadas o destruidas por el hierro del hombre.
No debemos concebir como normal que predomine el afán de ganancia material por sobre la defensa de los recursos naturales que son de TODOS. La Sierra es NUESTRA, de todos los que disfrutamos su perfil, de quienes respiramos el aire que purifican sus árboles, de quienes obtienen sus recursos de vida ancestrales sin dañarla, de las generaciones presentes y futuras. La sierra es gozo sin título de propiedad. Esta herencia que recibimos como pobladores de esta región intermontana nos obliga a transmitirla en óptimas condiciones. Llamamos a quienes viven, visitan, disfrutan, aman y respetan esta tierra, La Tierra, a protegerla.
Defendamos la sierra, la tierra, de especuladores que la ven como fuente de ganancia.
La construcción de este proyecto, en especial el túnel, no tiene más justificación que la ganancia de empresarios urbanistas. Ya existen vialidades que conectan la Carretera Nacional con Cadereyta en áreas donde ampliar los caminos ya existentes no traería la grave impactación ambiental que implica la construcción de un túnel a través de nuestra Sierra.
La vialidad que se impulsa por el actual gobierno del estado, abrirá a la urbanización grandes espacios en la falda de la sierra o en la sierra misma, áreas que irán siendo cubiertas por asfalto y contribuirán al déficit de áreas verdes así como al calentamiento (más!) de la ciudad y del planeta.
Nuestros esfuerzos deberían ir en dirección de conservación y rescate de áreas naturales, especialmente aquellas áreas verdes que son el hábitat de especies centenarias que serán lastimadas o destruidas por el hierro del hombre.
No debemos concebir como normal que predomine el afán de ganancia material por sobre la defensa de los recursos naturales que son de TODOS. La Sierra es NUESTRA, de todos los que disfrutamos su perfil, de quienes respiramos el aire que purifican sus árboles, de quienes obtienen sus recursos de vida ancestrales sin dañarla, de las generaciones presentes y futuras. La sierra es gozo sin título de propiedad. Esta herencia que recibimos como pobladores de esta región intermontana nos obliga a transmitirla en óptimas condiciones. Llamamos a quienes viven, visitan, disfrutan, aman y respetan esta tierra, La Tierra, a protegerla.
Defendamos la sierra, la tierra, de especuladores que la ven como fuente de ganancia.
NO al Túnel! SÍ a la Sierra!
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