CARTA ABIERTA

DEFENDAMOS NUESTRA PATRIA

UNIDAD DE LOS DE ABAJO

Al Pueblo de México
A la clase trabajadora
Al movimiento campesino
A los Pueblos indígenas

A los jóvenes, a los estudiantes,
a los hombres y a las mujeres

A los damnificados por más de 26
años de neoliberalismo, es decir
a todas y a todos los mexicanos

Hace más de tres años, en el marco del 88avo aniversario de la promulgación de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, más de 200 organizaciones convocadas al II “Diálogo Nacional: Hacia un Proyecto de Nación alternativo al neoliberalismo”, emitieron un Pronunciamiento llamado Declaración de Querétaro, “para acabar de una vez por todas con el desastre neoliberal y rescatar a la nación” y acordaron un Programa Mínimo no Negociable “como síntesis de las reivindicaciones más urgentes de nuestro pueblo.” Pero también para avanzar en el fortalecimiento de la autonomía e independencia de clase, en un proceso de articulación de las luchas de resistencia en nuestro país.

Muchos hechos se han sucedido del 5 de febrero de 2005 a la fecha: represión a las luchas de resistencia, fraude electoral, privatización de la seguridad social como la imposición de la reforma a la ley del ISSSTE, criminalización de las luchas sociales, creciente inseguridad pública y del narcotráfico, caída brutal de los salarios, crecimiento de la pobreza, ofensiva depredadora en contra de las comunidades y los recursos naturales, bosques, agua, etc., golpeteo constante a la autonomía y libertad sindical, mayor subordinación e integración al imperio del norte a través de la ASPAN, el Plan Mérida y la entrada en vigor del capítulo agropecuario del TLCAN, planes para desmantelar la educación pública como la Alianza por la Calidad de la Educación, etc., hasta llegar al intento de privatizar una de nuestra mayores riquezas energéticas: el petróleo.

Todos estos hechos son parte de una creciente y cada vez más aguda crisis social cuya contraparte ha sido la formación de fabulosas fortunas y el fortalecimiento económico y político de la oligarquía que gobierna México, en tanto la mayoría de los 107 millones de mexicanos sufre hambre, padece pobreza; cientos de miles de jóvenes se quedan sin escuela cada año y no encuentran empleo, en tanto cientos de miles de compatriotas emigran al norte en busca de trabajo. Millones de mexicanos carecen de vivienda digna y atención médica adecuada. La violencia y la inseguridad son el complemento cotidiano al que se somete cada vez más a la sociedad mexicana

Esta crisis social que permea a México, y que a momentos pareciera conducirlo al caos, es el resultado y expresión del Modelo Neoliberal impuesto a nuestro país desde 1982, y el desastre social que ha ocasionado a México es de tal magnitud, que el problema no estriba en documentar sus efectos en todos los órdenes de la vida nacional, sino más bien en desentrañar sus escenarios y alternativas de solución.

El gobierno de la ultraderecha, representado por el espurio Calderón, tiene como proyecto la instauración de un régimen dictatorial en beneficio de sectores oligárquicos en México, hipotecando la independencia y la soberanía nacional a los planes del imperialismo norteamericano, como lo intentará en estos días de festejos patrios, a través de la privatización del Petróleo y de Pemex. Sin embargo, frente a los proyectos de los vendepatria, en los últimos años las luchas de resistencia social, a lo largo y ancho del país, han venido creciendo y vigorizándose, en una gama que cubre todo el espectro social de los explotados y oprimidos de México.

En el campo y en la ciudad, en las comunidades, en los centros de trabajo, en las escuelas, en las colonias y los barrios, suman ya millones de mexicanos que están pasado del coraje y el hartazgo a formas elementales de organización y resistencia, que requieren ser unidas, para hacerlas crecer en autonomía en independencia de clase, para derrotar el modelo neoliberal y construir un México con libertad, justicia y democracia

En este contexto y reconociendo el formidable aporte programática, político e ideológico de la Declaración de Querétaro y el Programa Mínimo no Negociable, es que las organizaciones abajo firmantes, convocamos a TODAS las organizaciones sociales, sindicales, campesinas, indígenas, estudiantiles, ciudadanas, populares, políticas al Encuentro Nacional “Por el rescate de la Patria, Unidad de los de Abajo.”, a realizarse los días 18 y 19 de septiembre en el nuevo auditorio del Sindicato Mexicano de Electricistas, a partir de los siguientes puntos:

· Soberanía nacional y recursos estratégicos. Agua, electricidad, bosque, petróleo, educación, seguridad social y autosuficiencia alimentaria.

· Independencia nacional, tratados internacionales entreguistas y alternativas latinoamericanas y del Caribe (ALBA y otros).

· Resistencia Social, criminalización de las luchas y conculcación de derechos humanos y laborales.

· Crisis social, pobreza, desempleo e inseguridad pública y narcotráfico y desastre ambiental.

· Balance y perspectivas del movimiento social. Formas y agenda para la Unidad de los de Abajo.

Fraternalmente

México, D. F., a 11 de Septiembre de 2010

DIÁLOGO NACIONAL, SINDICATO MEXICANO DE ELECTRICISTAS

Diputados Federales: Valentina Batres Guadarrama, Mónica Fernández Balboa, Aleida Alavez Ruiz, Concepción Ojeda Hernández, Evangelina Sánchez Valdez, Layda Sansores Sanroman, Higinio Chávez García, Gerardo Villanueva Albarray, Pablo Arreola, Alejandro Sánchez Camacho, Humberto Zazueta Aguilar, José Antonio Almazán González, José Jacques Medina, Cuauhtémoc Velazco Oliva, Secundino Catarino Crispin, Irene Aragón Castillo, Alberto Esteva Salinas, Juan Abad De Jesús, Joaquín de los Santos Molina, Ramón Pacheco Llanes.

Responsable de la publicación: Fernando Amezcua Castillo, Secretario del Exterior.