viernes, junio 11, 2010

Estado de los Estados. Por Esto!

EU manda a Calderón a… Sudáfrica. Pelean mineros con policías en Cananea. Implantan un estado de sitio en la región...

Por Lilia Arellano



“Todo poder es una conspiración permanente”.-
Honoré de Balzac

De nada sirvió que Felipe Calderón se fuera “muy preocupado” a Johannesburgo, Sudáfrica, a disfrutar de los juegos del Mundial de Futbol, y que en el trayecto le diera tiempo de “exigir” a Estados Unidos “una investigación profunda, imparcial, objetiva” que esclarezca los hechos en los que murieron dos mexicanos a manos de agentes de la patrulla fronteriza, y reclamar “castigo a los culpables”. Los estadounidenses lo mandaron directo a la… Copa Sudáfrica 2010, al anunciar que aumentarán este año el número de agentes en la frontera, “para prevenir el flujo de armas y dinero del crimen organizado hacia México” y reiterar que los agentes de la Patrulla Fronteriza “se defendieron” de un “letal” y “mortal” ataque… con piedras, por lo que este crimen, como muchos otros ocurridos en circunstancias similares, quedará totalmente impune.

Sin duda que la “consternación” y la “indignación” de Calderón por los recientes y arteros asesinatos del niño Sergio Adrián Hernández y de Anastasio Hernández Rojas, fue de tal magnitud que estuvo a punto de pedirle al piloto de la aeronave que metiera reversa y se regresara a tierra azteca para atender personalmente el asunto, pero su “alto sentido del deber” como “jefe de Estado” de México frenó sus impulsos y se fue a cumplir con su “obligación” de estar presente en la inauguración del magno evento futbolero y a “apoyar”, firme y decididamente, a la selección mexicana. Por eso, se limitó a “reclamar” a Estados Unidos el establecimiento de criterios, objetivos y protocolos confiables en la aplicación de la ley y a manifestar su “preocupación” por el surgimiento de violencia contra mexicanos en territorio estadounidense, asociado además con el brote de otro tipo de expresiones antiinmigrantes.

A pesar de los gritos del michoacano, Barack Obama, presidente de Estados Unidos, no ha dicho media palabra sobre este asunto que ha tensado los relaciones bilaterales con México y se lo ha dejado a funcionarios de tercer nivel para que sostengan la impunidad de los agentes fronterizos: el vocero del Departamento de Estado, Philip Crowley, sostuvo que el incidente se produjo “cuando inmigrantes indocumentados mexicanos arrojaban piedras a agentes fronterizos” y subrayó que “cualquier agente del orden tiene derecho a la defensa propia, si personas levantan armas o arrojan piedras”.

Únicamente el vocero del Consejo de Seguridad de la Casa Blanca, Mike Hammer, declaró que lamenta “profundamente” la muerte del niño mexicano en la frontera entre Ciudad Juárez y El Paso a manos de un agente de la patrulla fronteriza. Agregó que las autoridades federales de su país iniciaron una investigación meticulosa de las circunstancias que llevaron a su muerte, entre las que puso de relieve “el entorno difícil y a menudo peligroso” en el que se desempeñan los agentes. También, el procurador general Eric Holder calificó el incidente como “extremadamente lamentable”. Sólo eso y, por supuesto, ninguna disculpa.

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ENFRENTAMIENTO EN CANANEA

El actual capitulo de la histórica lucha de los mineros de Cananea por sus derechos sindicales y por incrementar la seguridad en el desarrollo de su peligrosa actividad, falta mucho todavía por cerrarlo a pesar de la prisa que tiene el poderoso Grupo México en darle carpetazo al asunto y ponerla de inmediato a producir sobreexplotándola. La mañana del jueves, mineros bloquearon con piedras los accesos principales a la mina de Cananea, en Sonora, para impedir el paso de los autobuses con personal de compañías que ingresarían a limpiar el lugar para reactivar la mina. Si bien lograron impedir el paso de vehículos particulares, de inmediato arribaron al lugar cientos de federales con equipos antimotines, y lanzando gases lacrimógenos para dispersar y perseguir a los trabajadores, mientras estos les tiraban pedradas. La persecución se llevó a cabo hasta viviendas aledañas, donde los policías agredieron también a sus habitantes. Hasta el momento se habían reportado cinco heridos.

El director de Protección Civil Municipal, Julio Haro, demandó a los agentes federales que se abstuvieran de ingresar a las colonias, donde tres personas, entre ellos un discapacitado, fue intoxicado al caer una granada de gas lacrimógeno en el interior de su vivienda. Luego del zafarrancho, los autos particulares, autobuses de personal y pipas lograron ingresar a la mina, mientras que los agentes federales resguardan los accesos. Sergio Toledano, dirigente de la sección 65 del Sindicato Minero, advirtió que mientras los policías mantengan sitiada la ciudad, estará el riesgo de estos choques.

Por otro lado, en la capital de la República, la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) anunció la creación de un frente en respaldo a los mineros desalojados de Cananea y Pasta de Conchos. El presidente colegiado de la UNT, Francisco Hernández Juárez, adelantó la reactivación de protestas ante la política de la administración federal en el conflicto minero. El plan de acción por los golpes al Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y el Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Siderúrgicos de la República Mexicana incluirá marchas, desplegados, campañas informativas y hasta bloqueos, además de la ruptura del diálogo con la gestión de Calderón.

Y para iniciar, este jueves integrantes de organizaciones sociales, populares y sindicales se manifestaron en las principales calles de la capital de la República en apoyo a los trabajadores mineros en contra de “la política represora” de la administración de Felipe Calderón. Después de una marcha de la Glorieta del Ángel de la Independencia al Zócalo, los sindicatos Minero, Electricistas, de la UNAM, Telefonistas, y organizaciones como el Frente Popular en Defensa de la Tierra, de San Salvador Atenco y estudiantes de la UNAM y del Politécnico repudiaron el aseguramiento de la mina de Cananea y de la de Pasta de Conchos, en Coahuila, y expresaron su decisión de mantener la lucha social por los derechos laborales en el país.

Grupo México tiene prisa por poner en operación la mina de Cananea, la mayor productora de cobre del país, luego de que policías federales desalojaron a los trabajadores que estaban en huelga y ocupaban sus instalaciones desde hace casi tres años, para lo cual planea invertir 3 mil 800 millones de dólares para elevar la producción de 190 mil a 460 mil toneladas por año. Dos plantas de extracción SX/EW, que tienen en conjunto una capacidad de producción de 56 mil toneladas de cátodo de cobre al año, serán las primeras en reiniciar las operaciones de la mina, según lo informó Xavier García Quevedo, presidente de la división minera.

SONORA, ESTADO CLAVE

Tras la toma por la fuerza de la mina de Cananea por parte de las fuerzas federales al servicio del poderoso Grupo México del magnate Germán Larrea, y a poco más de un año de la tragedia de la Guardería ABC de Hermosillo donde murieron 49 niños, Sonora se convertirá en un estado clave para el resultado del proceso electoral del próximo 4 de julio, aun cuando la entidad no esté dentro del calendario electoral.

En la tierra gobernada por el panista Guillermo Padres, se desarrolla la ejecución de dos fuertes golpes que mandan claras señales a los inversionistas nacionales y extranjeros en el ámbito económico y político, y al mismo tiempo son utilizados dentro de la estrategia electoral calderonista para intentar llevar oxígeno a los agobiados candidatos de Acción Nacional, a través del sacrificio de la cabeza de un ex gobernador priísta, precisamente de esa entidad, Eduardo Bours Castelo, quien tiene mucha cola que le pisen.

El primero de los golpes referidos fue planeado cuidadosamente en las oficinas del secretario del Trabajo y Previsión Social, el servil Javier Alarcón, y las del corporativo de Grupo México, de donde surgió la orden de ataque, y perpetrado por comandos policiacos la noche del domingo: el desalojo de los trabajadores de Cananea, artera acción que fue bien calificada por el líder nacional de los mineros, Napoleón Gómez Urrutia, como una jugada de la administración de Felipe Calderón, producto de una simulación y de un acto de servilismo del gobierno federal hacia una empresa del tercer hombre más rico del país según la revista Forbes, para quien, claro está, trabaja todo el gabinete calderonista.

El exiliado dirigente de los mineros señaló que la toma por la fuerza de la histórica mina que produce el 40 por ciento del cobre del país, “es una agresión más contra el sindicato nacional de mineros, en contra de un sindicato democrático, independiente, que ha luchado muchos años por defender los intereses de los trabajadores”. Ante esa agresión, “napito” sostuvo que los mineros seguirán defendiendo sus derechos y no aceptarán la liquidación que el gobierno federal ofrece, por lo que se augura una larga y clásica lucha, entre los aguerridos trabajadores de las minas contra la oligarquía Larrea y sus perros de presa constituidos por los cuerpos policíacos federales y estatales, los dos en manos de panistas.

La complicidad entre la administración de Felipe Calderón y la de Guillermo Padres, con Germán Larrea, ha quedado de manifiesto y evidenciado durante todo el conflicto y fue comprobado con lo dado a conocer en la conferencia de prensa conjunta que ofrecieron el titular de la SCT, el nefasto Javier Lozano, y el presidente ejecutivo de Minera México, Xavier García de Quevedo, quienes ofrecieron el oro y el moro para reactivar económicamente a la región con la inyección de 113 mil millones de pesos, la mayoría de los cuales saldrá de los recursos fiscales de los contribuyentes mexicanos para beneficiar a una poderosa empresa privada.

La euforia por el éxito del ataque a los mineros de Cananea llevó al gobernador panista sonorense incluso, a exagerar la cantidad de recursos que serían inyectados en la región o, tardíamente, se le pidió que enmendara la plana a lo declarado hace menos de 24 horas, por lo que rectificó sus afirmaciones y dijo que serán 58 mil y no 113 mil, los millones de pesos que se inviertan en Cananea para reactivar la economía del municipio, los cuales se aplicarán a través de mejoras de infraestructura, así como ampliaciones a las zonas de producción de la mina. Cabe destacar que dicha rectificación se dio luego que diputados federales exigieron que se detallara el proceso de inversión de dichos recursos y el esquema de liquidación de los trabajadores.
La injusticia cometida contra los mineros de Cananea, cinco de los cuales se encuentran aún detenidos por las autoridades estatales, es de tal magnitud que senadores del PRD, PRI e incluso del PAN pidieron la intervención de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en este caso, con el propósito de garantizar el respeto a las garantías de los trabajadores. Los legisladores pidieron a la Secretaría de Gobernación gestionar con las autoridades involucradas en el cumplimiento de resoluciones jurisdiccionales a que se abstengan del uso de la fuerza y la violencia, petición que por supuesto no fue atendida.

Los senadores de las tres principales fuerzas del país también exigieron a la administración pública federal informar públicamente cuáles son los compromisos de la empresa Minera México para la contratación de los trabajadores con fines de reconstrucción y de operación ordinaria de la mina. En la Cámara baja, también la Comisión que da seguimiento al conflicto minero anunció que pedirá a la Comisión Permanente del Congreso la comparecencia de los secretarios del Trabajo, Javier Lozano; de Gobernación, Fernando Gómez Mont; de Hacienda, Ernesto Cordero; y de Economía, Gerardo Ruíz Mateos, para que expliquen los motivos del desalojo de la mina de Cananea, toda vez que existía un compromiso con el Congreso para instalar mesas de diálogo y buscar una solución al conflicto.

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