Carstens despierta temores en todos los sectores

Periódicos conservadores, así como columnistas de negocios

han estado advirtiendo sobre ese peligro
Por : Benjamin Castro

Fecha: 20 de octubre de 2006.

Era de esperarse que hubiese críticas a la designación de Agustín Carstens como coordinador económico del equipo del presidente electo Felipe Calderón y, por lo tanto, como futuro Secretario de Hacienda, pero sólo de parte de los sectores de la izquierda o de las figuras del movimiento de Andrés Manuel López Obrador. La filiación monetarista de Carstens, su origen académico que lo definen como uno de los llamados "chicago boys", así como su estancia en la burocracia del Fondo Monetario Internacional (FMI) lo hacían un blanco natural de las críticas de los sectores de la izquierda mexicana y los nacionalistas. Sin embargo, también sectores de derecha o ajenos a cualquiera de las tonalidades del espectro político están también manifestando su temor, el temor a un nuevo sexenio sin crecimiento económico y sin generación de empleos. Periódicos conservadores de Monterrey, así como columnistas de negocios han estado advirtiendo sobre ese peligro. El peligro de que Carstens de prioridad a la disciplina fiscal y monetaria y no deje recursos disponibles para garantizar el crecimiento a través de las obras públicas y el crédito a la industria y el campo. Estos sectores que advierten sobre otro sexenio sin crecimiento bajo la dirección de Agustín Carstens en la Secretaría de Hacienda, también sobre las consecuencias sociales y políticas que esto podría tener.

Sin crecimiento no solo no se crearían empleos, sino que también se agudizaría la miseria en que vive más de la mitad de los mexicanos. Con políticas recesivas como las que ya se aplicaron en Argentina -por ejemplo-y llevaron a ese país a la bancarrota bajo la conducción del FMI, seguramente nuestro país podría estallar en llamas y los estallidos sociales no se harían esperar. \nPor eso hay temor por la designación de Carstens entre todos los sectores y porque además representa una definición muy clara, muy abierta, pero no muy alentadora de parte de Felipe Calderón que está diciendo cuales son sus intenciones para el futuro al designar a este funcionario del FMI como secretario de hacienda de todos los mexicano, no solo de los ricos.

Sin crecimiento no solo no se crearían empleos, sino que también se agudizaría la miseria en que vive más de la mitad de los mexicanos. Con políticas recesivas como las que ya se aplicaron en Argentina -por ejemplo-y llevaron a ese país a la bancarrota bajo la conducción del FMI, seguramente nuestro país podría estallar en llamas y los estallidos sociales no se harían esperar. Por eso hay temor por la designación de Carstens entre todos los sectores y porque además representa una definición muy clara, muy abierta, pero no muy alentadora de parte de Felipe Calderón que está diciendo cuales son sus intenciones para el futuro al designar a este funcionario del FMI como secretario de hacienda de todos los mexicano, no solo de los ricos.