domingo, noviembre 26, 2006

"No podemos hacer nada en este momento", acepta Flavio Sosa

Milenio, 26 noviembre 2006
Monterey, Nuevo León, México.

"No podemos hacer nada en este momento", acepta Flavio Sosa

Líderes acusan a jóvenes anarquistas y estudiantes de los desmanes

"No podemos hacer nada en este momento", acepta Flavio Sosa

Al igual que Sosa, otros dirigentes como Zenem Bravo, Florentino López, Roberto García Lucero y Marcelino Coache intentaron contener sin éxito los ataques que lanzaban las bases de la Asamblea Popular a los efectivos federales.


La dirigencia de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca quedó completamente rebasada, principalmente por los grupos de colonos, jóvenes anarquistas y estudiantes universitarios que conforman el movimiento opositor que demanda la salida del gobernador Ulises Ruiz desde hace más de seis meses.
“Es incontrolable esta situación. No podemos hacer nada en este momento”, declaró Flavio Sosa, integrante del Consejo de los Pueblos de Oaxaca, mientras se libraban los combates más intensos entre appistas y elementos de la Policía Federal Preventiva en el centro histórico de esta ciudad capital.
Sin embargo, la PFP identificó a los agresores como integrantes del Frente Popular Revolucionario y del CGH.
Al igual que Sosa, otros dirigentes como Zenem Bravo, Florentino López, Roberto García Lucero y Marcelino Coache intentaron contener sin éxito los ataques que lanzaban las bases de la Asamblea Popular a los efectivos federales.
De acuerdo con los dirigentes, justo para evitar esta situación, antes de la movilización de ayer habían acordado que los 260 consejeros estatales integrarían brigadas de seguridad que se encargarían de coordinar la realización pacífica de la marcha y del cerco a la PFP, algo que no ocurrió finalmente.
Según Marcelino Coache, vocero en turno de los rebeldes, la APPO ya le había avisado a los mandos de la PFP en Oaxaca y a la Secretaría de Gobernación que “la manifestación sería pacífica y en ejercicio de su derecho a manifestarse contra la presencia de las fuerzas federales de apoyo en la entidad, y para demandar la salida del gobernador”.
Sin embargo, esta versión contrasta con el plan de acción de los opositores que contemplaba desde un inicio “la toma del antiguo palacio de gobierno”, ubicado justo en el corazón del zócalo de la ciudad.
Antes de iniciar la marcha de ayer, los rebeldes le habían “recordado a Ulises Ruiz que esto aún no termina y no terminará hasta su salida. Oaxaca no perdona los asesinatos y la humillación contra un pueblo. Esas cosas son imperdonables”, señalaron a través de un comunicado que leyeron al comienzo de su movilización.
“La APPO sostiene la demanda principal que es la salida de Ulises Ruiz y sus grupos armados del gobierno de Oaxaca, los paramilitares y porros comandados por Heliodoro Díaz Escárraga, Lino Celaya Luria, Jorge Franco, Bulmaro Rito Salinas y Manuel Martínez Feria, así como Lizbeth Caña Cadeza”, dice también el escrito.
“El encontrarse en el poder no los exonera de castigo por las muertes y violaciones que han cometido contra los habitantes de Oaxaca”, concluye.
México • Diego Enrique Osorno y Óscar Rodríguez

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