Anulan elección de presidente y secretario general del PRD

Anulan elección de presidente y secretario general del PRD
La Jornada, 20 de julio de 2008

La Comisión Nacional de Garantías (CNG) del PRD anuló anoche las elecciones del pasado 16 de marzo para presidente y secretario general de ese instituto político, al considerar que hubo irregularidades en más de 20 por ciento de las casillas instaladas.
Fue una decisión unánime de los tres integrantes de la CNG, aunque la presidenta del organismo, Ernestina Godoy, emitió un “voto concurrente” porque, consideró, no se tomaron en cuenta “las prácticas fraudulentas llevadas a cabo durante la jornada electoral”, sobre todo las referidas a casillas con votación atípica y no instaladas, con la que se benefició principalmente al candidato de Nueva Izquierda (NI), Jesús Ortega.
En conferencia de prensa, después de sesionar desde el mediodía con interrupciones y recesos, Godoy precisó que en total las casillas atípicas y no instaladas son 430, que representan 26.65 por ciento de la votación que obtuvo Ortega: 147 mil 12 votos.
Se trata, explicó, de un promedio de 341.88 votos por casilla, y si se compara con el 76.65 por ciento del resto de la votación del candidato de NI, es decir, con los 410 mil 717 votos, éstos son en promedio 91.27 sufragios por casilla.
Detalló que la CNG cuenta al menos con 52 casos documentados de votación atípica en Chiapas “en los que se demuestra esta acción deliberada para beneficiar a un candidato”. Advirtió que la comisión debe resolver si es “omisa ante prácticas que denigran y avergüenzan a todo el partido y terminar por dar carta de naturalización a los delitos electorales que eufemísticamente llamamos votación atípica o las desterramos para siempre”.
Recalcó que no sólo se trata del conteo y la calificación más larga de una elección en la historia de los partidos políticos, sino del proceso electoral con más irregularidades en 19 años de existencia del PRD.
Los secretarios de la CNG, Renato Sales y Dolores de los Ángeles Nazares, replicaron que no se consideraron esos elementos para anular la elección, porque no hubo forma de acreditar las irregularidades.
Sin embargo, después de la conferencia conjunta, Godoy explicó el mecanismo por el que, dijo, se manipuló la documentación electoral para hacer aparecer actas que consignan votación de casillas no instaladas y atípicas, y advirtió que el PRD no podrá subsistir ni desarrollarse en la simulación jurídica.
Precisó que la votación atípica se ha perfeccionado en el PRD, ya que aun cuando se han impuesto barreras, como la entrega de un límite de boletas –de 600 a mil por casilla–, se siguen rebasando y se han perfeccionado tanto en la presentación física de las casillas como en la elaboración de actas para cuidar que la votación sea aritméticamente igual, otorgando 15 o 20 votos a otros de los contendientes para evitar “casillas zapato”.
Destacó que en la controvertida elección hubo 161 casillas con votaciones de 901 a mil electores, cifra 287 por ciento mayor que la registrada en la elección presidencial de 2006.
De un total de casillas impugnadas, principalmente por los candidatos Alejandro Encinas y Alfonso Ramírez Cuéllar, el total de votos fue de 129 mil 364. De éstos, 84 mil 175 fueron para Ortega, 13 mil 216 para Encinas, mil 395 para Ramírez Cuéllar, 848 para Camilo Valenzuela y 690 para Miguel León; el resto fueron anulados.
Recalcó que sólo en estas casillas la votación obtenida por el candidato de NI representa 15.09 de su votación nacional.
Por su parte, mediante un comunicado, Ortega expresó su desacuerdo con la resolución. “Prefirieron los comisionados anular la elección antes de reconocer que fui favorecido por el cómputo final, decisión que no comparto y por la cual recurriré al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación”.
Acusó a Godoy de actuar como juez de consigna, ya que “sólo quiere engañar tratando de responsabilizarme; sin embargo, no vio en su ‘arduo” análisis ninguna objeción en las verdaderas anomalías que realizaron los que apoyaban a Alejandro Encinas”.
La CNG determinó que deben fincarse sanciones disciplinarias a quienes incurrieron en las irregularidades que motivaron la anulación del proceso electoral. Renato Sales precisó que no implica sanciones penales, porque es un proceso interno y no participó el IFE.
Informó que el Consejo Nacional del PRD tiene 30 días de plazo para convocar a elecciones extraordinarias.
Encinas acatará “bajo protesta” la resolución emitida por la CNG
La Jornada, 21 de julio de 2008
Alejandro Encinas, candidato de Izquierda Unida (IU) a la presidencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), dijo ayer que acatará “bajo protesta” la resolución de la Comisión Nacional de Garantías (CNG) que anuló las elección, y señaló que “por convicción y congruencia no acudiré al tribunal electoral”.
Anunció que ese fallo “no cancela nuestro triunfo, sólo lo pospone. El de Izquierda Unida, el de la militancia que desea rescatar a nuestro partido. Iré a una nueva elección por la dirigencia nacional y al rescate del PRD de las manos de quienes han perdido toda vergüenza”.
Destacó: “Nos han despojado de un triunfo real y legal. Contra cualquier pronóstico. Un triunfo ganado con el respaldo y apoyo de la inmensa mayoría de los militantes hartos de la burocracia y la corrupción partidaria”.
En conferencia de prensa señaló que está convencido de que, “pese a las limitaciones y a la en ocasiones incompetente e irresponsable actuación de los órganos jurisdiccionales de nuestro partido, no se debe permitir la injerencia de un órgano del Estado en la vida interna de los organismos políticos. Allá otros, quienes buscan que Calderón les levante la mano”.
Encinas exigió que la Comisión Nacional de Garantías “deslinde responsabilidades, identifique a los tramposos y establezca las sanciones estatutarias o penales que correspondan, sea quien sea quien las haya cometido. Ésta es una condición para mantener la unidad y cohesión futura de nuestro partido. Se deben castigar las prácticas indebidas y erradicar la impunidad. No actuar y ser omisa haría cómplice a esa comisión”.
Subrayó que “en tanto esto no suceda, violar los estatutos y burlarse de la militancia seguirá siendo un negocio rentable. La ilegalidad hoy favorece a los infractores y se benefician de ello”. Dijo que éste será el único pronunciamiento público que emitirá respecto del dictamen que anula la elección interna del PRD, hasta la conclusión del proceso de consulta nacional sobre la reforma energética.
“La defensa del petróleo y nuestra participación en el movimiento y consulta nacional es nuestra prioridad, y no contribuiré a distraer la atención del más importante asunto público nacional, menos cuando lamentablemente abundan tontos útiles que se encargan de ello”.
Sostuvo que la nulidad de la elección nacional del PRD “es un triunfo de los tramposos y de los sinvergüenzas. Es un triunfo de la impunidad. Un triunfo de quienes, siendo incapaces de competir y ganar limpiamente cualquier elección interna, corrompen y boicotean para garantizar su supervivencia política y económica”.
Encinas refirió que “son los mismos que provocaron a la nulidad de la elección cuando compitieron contra Amalia García y perdieron posteriormente. Son los mismos defraudadores identificados en el informe de Samuel del Villar, que quedaron impunes; son quienes ocultaron los resultados de la auditoría de la Comisión de Fiscalización sobre el manejo de recursos del partido y hoy ocupan cargos de dirección y de representación popular; son los mismos que han comprometido la autonomía política y la independencia del PRD. Quienes tiran la piedra y esconden la mano”.
La nulidad “es también un triunfo para la derecha y para quienes desean una izquierda dócil y complaciente. De quienes buscan un país sin contrapesos, sin una izquierda fuerte e inteligente, quienes no desean una oposición política real. También es resultado de la incompetencia y la vida facciosa. De quienes no fueron capaces de honrar su responsabilidad y su palabra para auditar el padrón de afiliados, hacer valer sus reglas y adoptar las decisiones en la organización y cómputo de nuestras elecciones internas”, concluyó Encinas Rodríguez.
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Al anular la elección, el PRD “se está dando un balazo en el pie”: Ortega
La Jornada, 21 de julio de 2008
“Molesto” con el resolutivo de la Comisión Nacional de Garantías (CNG) que anuló las elecciones del 16 de marzo pasado para dirigente del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Ortega aseguró que el fallo constituye un “recurso político con el propósito de impedir el que se reconozca la mayoría que legítimamente obtuve”. Con la nulidad, aseguró, el partido “se está dando un balazo en el pie”.
Ayer, en conferencia de prensa, afirmó que el fallo de los comisionados se derivó de la “imposibilidad legal de imponer a Alejandro Encinas”, y aseguró que en el acuerdo de nulidad prevaleció un intento por “imponer un veto a mi persona”.
Agregó que “no hay elementos jurídicos y legales para sostener la nulidad de la elección. No existen razones para sustentar que estuvo plagada de irregularidades y de actos dolosos que hubiesen justificado la nulidad”, dijo en una conferencia de prensa donde además aseguró que si hubo fallas técnicas, éstas son responsabilidad del Comité Técnico Electoral (CTE).
Según Ortega, lo que debió hacer la CNG es “reconocer el resultado del cómputo y con ello avalar la actitud responsable y madura de más de un millón de militantes.
Ortega Martínez dijo que esperaría a ser notificado oficialmente de la resolución, emitida la noche del domingo por la comisión, para analizar su contenido y determinar si acude o no al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
Condicionó el no recurrir a esa instancia a que el resolutivo de los tres consejeros esté “apegado a la legalidad”. Si no, advirtió, ejercerá su derecho de presentar una queja ante el tribunal: “Yo no voy a mandar al diablo a las instituciones del partido. Voy a conocer la resolución al detalle y si considero que se apegaron a la legalidad, el asunto para mí ahí termina. Pero si no, recurriré a una instancia que hemos contribuido a construir”.
Sostuvo que fue Encinas, el candidato del bloque Izquierda Unida, quien acuñó durante la campaña el término “cochinero”, con el cual –expuso– creó un escenario “con el propósito evidente de descalificar la elección y el probable triunfo” de la planilla de Nueva Izquierda.
“Sus acompañantes en la campaña (de Encinas), Dolores Padierna Luna, (Juan Manuel) Ávila, Gerardo Fernández Noroña, siempre actuaron como corifeos de una estrategia política orientada a descalificar el proceso”, afirmó.
Ortega Martínez aseguró que no está dispuesto a negociar la integración de los órganos estatutarios de dirección partidaria. Y precisó: “No voy a aceptar negociaciones al margen de la legalidad, ni insinuaciones de ‘ya arreglemos esto’ y que nos distribuyamos mita y mita al consejo y al congreso nacional y (ver) cómo nos arreglamos para las diputaciones”, expresó.
Cuestionó el que el ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador “no asumiera la actitud de dirigente de todo el partido, y no el de una fracción, porque eso, creo, afectó política y legalmente, como ya vimos, a la elección”.
Aseguró que en el proceso perredista se confrontaron dos visiones de partido: una en la que se intentó “homogeneizar el pensamiento del PRD, que pretende la verdad única y que ésta se imponga como credo, y que es autoritaria”, y otra “que intentamos plural, democrática, como es el ADN partidario, como es la genética partidaria”. En ese sentido, dijo que no cejará en el objetivo de que el Partido de la Revolución Democrática “preserve su condición democrática. Aquellos que esperan que nos desesperemos, que yo particularmente pierda la paciencia, que pierda la sapiensa (sic), les recomiendo que ellos pierdan toda esperanza: nos vamos a mantener luchando para hacer del PRD un partido consecuente con sus objetivos”.